jueves, septiembre 06, 2007

La vejez

Hace apenas unos días se fueron de León los papás de Bruno, debo reconocer que es la primera vez que compartimos tantos días juntos, desde el amanecer hasta que llagaba la noche. Tuvimos la suerte de poder pasear por varios lugares y creo que solo el estusiamo les dio las fuerzas necesarias para hacer lo que propusimos.
Pero su estancia fue para mí una oportunidad de vivir con gente de entre 72 a 83 años y de una manera que yo no conocía. La experiencia que tengo con gente mayor ha sido a través de mis abuelos paternos, gente de campo, mi abuelo ahora tiene 82 años y toda su vida ha trabajado en el campo, actualmente sigue trabajando sus tierras, se levanta muy temprano y tiene la ventaja de vivir en un lugar con aire limpio, me parece que su vida ha sido simple (no parece necesitar grandes satisfactores para vivir) y espero que siga disfrutando su vida que él ha elegido como llevar. Mi abuela a pesar de sus problemas de presión ahí la lleva. Qué decir de mis padres, mi papá tiene 62 años, me parece que es muy joven y fuerte, sus preocupaciones son cómo administrar los recursos para llevar una vejez digna, sin depender de los hijos. Hace poco Bruno me preguntó qué consideraba como una aportación importante de mis padres. En ese momento tenía mucho sueño, pero mi respuesta en cuanto a mi padre es responsabilidad, ahora puedo entender y admirar su responsabilidad para proveer de lo necesario para el desarrollo de sus brotes y compañera y poder vivir sin grandes problemas, nos dio comida, educación y libertad a mis hermanos y a mí, solo lamento que para ello haya tenido que viajar tanto y no estar en situaciones en las que el papel del papá es importante. De mi madre admiro su entereza, inculcarnos la autosuficiencia en varios sentidos, enseñarnos cosas con el ejemplo, siempre ha estado ahí, apoyándome en todo momento.
Así que las historias con la vejez son muy variadas, me he preguntado si tendré la fortuna de llegar a la edad de mis abuelos, y si fuera así, de qué manera lo haría. Lamiéndome mis dolencias o retando a las adversidades, es sencillo decir esto a mi edad, pero creo que la vida nos cobrará en la vejez como hayamos vivido o desperdiciado nuestro tiempo de jóvenes. Por lo pronto, trataré de aprender de mis vivencias con los ancianos, aquí en España hay muchos, el gobierno me parece que los procura lo suficiente como para no ver ancianos abandonados, desnutridos o descuidados, aquí las ancianitas se arreglan y visten mejor que las jovencitas, ver para creer, pero me gusta como llevan su vejez, con dignidad, con ganas de seguir viviendo a pesar de las dolencias, ojalá lleguemos a su edad de la mejor manera.

1 comentario:

Azul Maheswari dijo...

Es impresionante ver la enterza con que algunos "ancianos" realizan sus vidas; el orden, los cuidados, la seguridad y claridad de sus actos.

Yo espero ser una mujer de 82 años, llena de vida y con ganas de seguir aprendiendo.

Pienso que tú serás una de esas personas mayores (en el futuro, claro está) que será un ejemplo como ya lo eres ahora.